A la caravana se sumó una protesta en la Regional de Escuelas. Ambos acontecimientos estuvieron enlazados y se registraron desde la media mañana y hasta pasado el mediodía del pasado viernes en Caleta Olivia. Fue al cumplirse el cuarto día consecutivo del nuevo paro de actividades que llevó adelante en toda la provincia el principal gremio docente, ADOSAC.
Estimativamente, fueron casi cuatrocientos los automóviles y camionetas que recorrieron el área urbana céntrica partiendo desde la costanera accionando sus bocinas.
En muchos casos se les adosaron globos celestes y blancos y carteles con leyendas de apoyo a la lucha docente y fuertes críticas al gobierno provincial.
El gremio viene reclamado un nuevo llamado a paritarias para exigir mejoras salariales ya que el gobierno solo otorgó un 4 % de incremento en marzo y dispuso aplicar ajustes mediante una cláusula gatillo acorde a incremento de costo de vida mensual.
A su vez, la ADOSAC señala que ese sistema deja a miles de docentes con ingresos por debajo de la línea de pobreza y el conflicto alcanzó un alto pico de alta tensión luego que, en declaraciones de prensa, la presidenta del Consejo de Educación (CPE), María Cecilia Velázquez, dijera que el gremio está llevando adelante “huelgas salvajes”.
CONCENTRACION
La caravana protagonizada por padres y docentes, finalizó frente a la sede de la Dirección Regional Zona Norte de Escuelas, ubicada en la avenida Eva Perón, donde se desplegaron pancartas en medio de cánticos y sonidos de redoblantes.
En ese lugar hubo varios oradores y se dio lectura a un documento del gremio titulado “Ni criminales ni salvajes” en claro mensaje a Cecilia Velázquez.
“La presidente del Consejo de Educación elije el agravio en lugar de impulsar el dialogo y dar respuestas favorables a los reclamos” se expresa en el documento, señalándose además que los mismos no se limitan a lo salarial ya que también comprenden otras reivindicaciones sobre condiciones laborales y edilicias.
Más adelante se resalta que “la crisis educativa se agrava por la falta de lineamientos pedagógicos y por una trayectoria vacía de contenidos”.
En los párrafos finales se pide a la titular del CPE que deje de ofender a los docentes y que se digne a sentarse en una mesa de negociación “porque nunca lo hizo”.